Esta semana continuaremos estudiando los Principios de la Salud Física, Mental y Espiritual. Hoy aprenderemos los beneficios del ejercicio físico para tu bienestar y tu salud.
Si ponéis en práctica estos conocimientos fielmente y con entusiasmo, sentiréis un cambio radical en vuestra salud integral. Espero que valoréis la importancia que estos principios tienen para ti, para tu salud, y para los que os rodean. No dudéis en compartir estos conocimientos una vez empecéis a sentir las mejoras que te traerán. Al compartir estos valiosos principios con otras personas para que se beneficien ellos también, les estaréis haciendo un favor. De esta manera haremos que este mundo mejore y daremos nuestro aporte para que sea un lugar más humano. Nuestra vida es importante en la medida que ayudemos a otros a mejorar su salud y su felicidad.
Sexto Principio de la Ley Natural: el ejercicio físico. Conoce los beneficios del ejercicio físico.
Aunque comas sano y natural, no se puede vivir sano sin ejercicio físico. La mejor manera de sentir los beneficios del ejercicio físico es seguramente más simple y barato de lo que pensabas: caminar enérgicamente. Es recomendable que lo hagas como mínimo una hora diaria. Puedes hacer media hora por la mañana y media hora por la tarde. Lo ideal es hacerlo por campo, montaña o playa, siempre que sea posible. Si no tienes la oportunidad de hacerlo en estos lugares, no te preocupes. Busca calles en las que no haya mucha circulación de coches, donde toque el sol y no haya mucho ruido.
Para experimentar los beneficios del ejercicio físico no necesitas máquinas ni pesas. No necesitas gastar nada de dinero, pues caminar es lo más sano y natural, y es lo más barato también. Aunque nadar también es sano, el hombre está hecho para caminar. ¿La mejor manera de caminar? Camina erguido, a buen paso. Siempre respirando profundamente y con ritmo, sin excederte.
Como todos los principios, los comparto porque he experimentado personalmente sus beneficios. Además de hacer ejercicio saludable y tomar el sol, tengo mi propio huerto para tener las verduras ecológicas, cosa que te recomiendo también que hagas.
Aún mejor: suma el pensar positivo a los beneficios del ejercicio físico
Piensa en positivo. Medita sobre los beneficios de la vida sana y el privilegio de haber conocido estos principios de salud. Gracias a ellos has aprendido a alimentarte más natural y saludable. Has conocido el riesgo para tu salud el comer ciertos alimentos.
Así que no te sientas infeliz porque has dejado de comer algunas comidas, después de todo éstas no beneficiaban a tu salud y sólo te enfermaban. Tampoco tengas complejo ni vergüenza de decir que has tomado la decisión de no fumar o de no tomar bebidas alcohólicas ni refrescos. Sí, evita también los refrescos. Nada bien te harán con su gran cantidad de azúcar, químicos, colorantes y conservantes que además producen dependencia.
Sé prudente y educado. No critiques a nadie que no sigue o no entienda la vida sana, pero sé firme y fiel en seguir los Principios de Salud. La vida es demasiado importante como para gastarla en costumbres y vicios que sólo hacen mal a tu salud y restan tu utilidad en este mundo.
Toma acción y comparte tu experiencia
Sé mejor y siéntete mejor cada día al tomar acción sobre tu bienestar. Proponte el objetivo de aprender cada día cosas nuevas y sanas según Natura. Más que eso, ponlas en práctica y con entusiasmo. Sentirás cómo tu salud y tu vida cambiará totalmente. Serás una nueva persona.
Lo ideal es que tu pareja y tu familia acepte también este estilo de vida saludable. Pero si esto no puede ser, busca a otras personas que quieran mejorar su condición de vida. Cuando se hace la Reforma en compañía se disfruta más y es más fácil hacer los cambios necesarios, compartiendo estos conocimientos y experiencias.
Explícame a mi sobre tus progresos y tu experiencia para que yo me alegre también de que mi trabajo no ha sido en vano. Tanto si me quieres contar tu experiencia o hacerme cualquier otra pregunta, hazlo a través de mi e-mail jamigo@reforma-pro-salud.com
Decálogo de la Ley Mental y Espiritual: sexto principio
El Sexto Mandamiento de la Ley de Dios se encuentra en la Biblia en Éxodo, capítulo 20 y versículo 13. Dice así: “No matarás”.
En el Evangelio según San Mateo, capítulo 5 y versículos, del 21 al 24, Jesucristo enseñó: “Oísteis que fue dicho a los antiguos: ‘No Matarás, y cualquiera que matare será culpable de juicio. Pero yo os digo que cualquiera que se enoje contra su hermano, será culpable de juicio; y cualquiera que diga: Necio (imbécil) a su hermano, será culpable ante el concilio; y cualquiera que le diga: Fatuo (loco), quedará expuesto al infierno de fuego. Por tanto, si traes tu ofrenda al altar, y allí te acuerdas de que tu hermano tiene algo contra ti, deja allí tu ofrenda delante del altar, y anda, reconcíliate primero con tu hermano, y entonces ven y presenta tu ofrenda…’.
Jesucristo, el Gran Maestro, nuestro Salvador, amplía y especifica este Mandamiento tan escueto: “No matarás”. Cuando tú maltratas u ofendes con alguna palabra despreciativa a tu prójimo, ya estarás pecando contra él. Le estás hiriendo y le estás insultando. De allí puede empezar una riña que puede acabar en odio o, aún peor, en un crimen. Cuando menospreciamos a alguna persona, estamos pecando también contra nuestro Padre Celestial, ya que esta persona es hija de Dios y merece nuestro respeto.
Ser un buen cristiano, amando sin criticar ni juzgar
No debemos criticar ni juzgar a nadie, pues el corazón y las circunstancias de cada persona sólo las conoce Dios. Él juzgará y dará a cada uno el premio o el castigo que merece. Algunos justifican su mal trato alegando que la persona se lo merece por su poca educación y su torpeza, pero eso no está bien. Jesús nos enseñó por precepto y por ejemplo que debemos amar a todo el mundo, aún los que no lo merecen. Él nos enseñó que debemos amar incluso a nuestros enemigos, y devolver bien por mal. De esta forma seremos hijos de nuestro Padre Celestial, que hace salir su sol sobre buenos y malos, y llover sobre justos e injustos (Mateo, 5:38-48). Os ruego que leáis este pasaje bíblico.
La mayoría de los cristianos no han entendido el cristianismo y se comportan como cualquier persona que no tiene la esperanza de la vida eterna. Muchos cristianos creen que el cristianismo es rezar y seguir algunas ceremonias, pero no es así. Ser cristiano es seguir el ejemplo de Cristo. Leed en la Biblia Santiago, 2:8-26, y os quedaréis sorprendidos de lo que nos enseña el apóstol Santiago respecto al verdadero cristianismo
Acuérdate que el Mandamiento más grande es “Amarás al Señor tu Dios de todo tu corazón, con toda tu mente y con todas tus fuerzas”. Y el segundo es semejante a éste: “Amarás a tu prójimo como a ti mismo”. Mateo, 22:36-40. Estos dos Mandamientos resumen todos los diez Mandamientos de la Ley de Dios, dados en el Sinaí a Moisés. Éxodo, 20:1-17.
Para llevar
“Dios ha establecido Leyes que gobiernan nuestra constitución, y para cada transgresión hay una penalidad (enfermedad) que debe cumplirse tarde o temprano. La mayor parte de las enfermedades que han hecho sufrir y que están haciendo padecer a la humanidad, han sido creadas por los hombres debido a la ignorancia de las Leyes básicas que rigen su propio organismo. Parecen indiferentes en materia de salud, y trabajan con perseverancia para despedazarse, y cuando están quebrantados y debilitados corporal y mentalmente, mandan a buscar al médico y se acarrean la muerte con las drogas (medicamentos)” CRA.20